La robótica en medicina tiene el potencial para ayudar a cirujanos y médicos en el ejercicio de sus funciones. Los robots aplicados al sector médico son cada vez más comunes y ofrecen numerosas ventajas. Sin embargo, su uso no está exento de ciertos riesgos. A continuación profundizamos sobre la robótica médica y sus usos presentes y futuros.
¿Qué es la robótica en medicina o cirugía?
La robótica es el conjunto de ciencias encaminadas al diseño, producción y empleo de robots para tareas normalmente destinadas a humanos. El avance de las nuevas tecnologías ha hecho posible la aplicación de la robótica a diferentes sectores (véase nuestro artículo sobre robótica educativa), entre ellos la medicina.
En este sentido, la robótica en la medicina consiste en la implementación de máquinas automatizadas para el desarrollo de funciones médicas tales como la cirugía, la asistencia sanitaria o las terapias de rehabilitación, entre muchas otras.
El objetivo de la robótica en medicina es facilitar el trabajo de sanitarios, cirujanos y profesionales del sector en general, maximizando la precisión de los procesos como operaciones o cirugías y minimizando las limitaciones y deficiencias del ser humano.
Orígenes y evolución de la robótica médica
El orígen de la robótica en medicina se remonta al año 1985, cuando el brazo robótico PUMA 560 se utilizó por primera vez para realizar una neurocirugía de forma exitosa. Este mismo robot fue usado en años sucesivos para la realización de cirugías poco invasivas, y en 1987 llevó a cabo una resección transuretral.
Poco después, en 1990, el sistema AESOP se convirtió en el primer robot aprobado por la FDA, el organismo que regula en Estados Unidos el uso de alimentos,medicamentos, aparatos médicos, productos cosméticos y biológicos u otros derivados sanguíneos.
Uno de los principales avances de la robótica en la medicina se produjo en el año 2000, cuando salió a la luz el robot Da Vinci, el primer sistema aprobado por la FDA para la realización de cirugías de complejidad media. Este robot, con las debidas actualizaciones, todavía se utiliza hoy en día.
Desde entonces, la robótica aplicada a la medicina no ha dejado de evolucionar y hoy en día se utiliza en diferentes ámbitos médicos, como veremos en el siguiente punto.
Aplicaciones de la robótica en la medicina actual
Existen diferentes tipos de robots médicos, diseñados para el desarrollo de diversas tareas. A continuación vemos las principales funciones que puede desempeñar la robótica en la medicina actual.
Cirugía
La evolución de los robots en la medicina ha hecho posible su uso en operaciones quirúrgicas. Gracias a ellos se han podido implementar técnicas de cirugía menos invasivas. De esta manera, se puede realizar cirugías en menos tiempo y que el tiempo de recuperación del paciente también sea menor.
Asimismo, los robots en medicina y cirugía pueden trabajar con una mayor precisión, evitando errores y limitaciones propias del ser humano. Estas máquinas cuentan con sensores que les permiten analizar o diagnosticar procesos, así como de realizar las intervenciones en base a unos parámetros exactos.
Rehabilitación
Los robots en medicina también se emplean en procesos de rehabilitación. En un principio, se destinaron sobre todo a ayudar a personas con discapacidades motoras. Con el tiempo, estos sistemas se ha ido haciendo más efectivos y cuenta con mayor rango de actuación, por ejemplo, para la rehabilitación de personas que han sufrido pérdidas sensitivas a causa de una accidente o una enfermedad.
Almacenamiento y distribución de medicamentos
Uno de los usos más extendidos en la robótica médica es el almacenamiento y transporte de medicamentos. Actualmente existen robots capaces de gestionar de forma mucha más efectiva que los humanos la dispensación y dosificación de medicinas. Además, los robots más avanzados cuentan con inteligencia artificial que les permite desplazarse por si mismos y encontrar la ruta más eficaz entre dos puntos.
Las ventajas del empleo de este tipo de robots se han hecho patentes durante la epidemia por el Coronavirus. Gracias a ellos, se pudo llevar la medicación a los pacientes sin riesgo de infección para los sanitarios.
Asistencia sanitaria
El uso de asistentes robots en medicina también son cada vez más frecuentes. Por ejemplo, para prestar servicio en zonas contaminadas o con alta presencia de virus o bacterias. Incluso, como veremos más adelante, como compañía y distracción para los niños y pacientes de todas las edades.
Prótesis y exoesqueletos robóticos
Actualmente existen prótesis de casi todo tipo que se pueden utilizar como sustitutos de miembros perdidos. Sin embargo, la robótica en medicina quiere ir un poco más allá y apuesta por los exoesqueletos robóticos. Se trata de instrumentos capaces de imitar los movimientos normales de una extremidad, recogiendo los impulsos neuronales del cerebro.
El avance de estas prótesis electrónicas permiten avances impensables hasta hace pocos años, como mover el miembro sustituido o incluso llegar a sentir a través de dicha prótesis
Recuperación de sentidos
Gracias a la robótica en medicina ya se puede llegar a recuperar sentidos que se creían perdidos. Por ejemplo, en 2014 se realizó un trasplante de cóclea a una mujer llamada Joanne Milne que le permitió escuchar por primera vez a los 40 años de edad. En 2015, Alle Zderad pudo recuperar la vista gracias a la implantación de un ojo biónico.
Investigación de vacunas
La robótica en medicina también se alía con la inteligencia inteligencia artificial en la búsqueda de vacunas y nuevos tratamientos. Gracias a la unión de estas dos tecnologías se puede procesar una cantidad mucho mayor de datos y realizar pruebas en laboratorio con la máxima precisión.
Beneficios de la robótica aplicada a la medicina
Las principales ventajas de la robótica en medicina son los siguientes:
- Múltiples ventajas a la hora de hacer cirugías:
- Mayor precisión, evitando el temblor humano.
- Procedimientos menos invasivos.
- Intervenciones más rápidas y eficaces.
- Recuperación del paciente en menos tiempo.
- Menor riesgo de daños en tejidos
- Capacidad de acceso a zonas delicadas o complejas.
- Aplicación en muchas tareas: rehabilitación, asistencia, transporte, etc.
- Desarrollo de nuevas técnicas de estudio, diagnóstico y tratamiento.
- Equipos capaces de trabajar en condiciones difíciles, por ejemplo en entornos con alta radiación o contaminados.
- Se pueden añadir otros instrumentos, como cámaras de vídeo para la posterior visualización de las operaciones.
- Posibilidad de realizar o dirigir operaciones quirúrgicas desde cualquier parte del mundo.
- Permite liberar a los profesionales del sector de hacer las tareas más mecánicas o repetitivas.
- Etc.
Inconvenientes de la robótica en medicina
Sin embargo, hay que tener en cuenta que la robótica en medicina también cuenta con una serie de inconvenientes, o mejor dicho, aspectos a mejorar.
- Tecnología en vías de desarrollo. Todavía queda mucho por mejorar y muchos de estos sistemas están todavía en fase experimental.
- Costes elevados. No todas las instalaciones sanitarias pueden tener acceso a instrumental de este tipo, y su uso se limita a hospitales o centros privados de investigación sanitaria.
- Son sistemas cuya programación y manejo resultan complejos, y se necesita personal especializado y formado en ambos casos.
- No están exentos de fallos, sobre todo en operaciones con cierto grado de complejidad. Hay casos de pacientes que han reportado quemaduras o daños en órganos adyacentes.
- Falta de normativa. Volvemos a una cuestión polémica que rodea la implantación de estas nuevas tecnologías. Por ejemplo, si un robot quirúrgico comete un fallo que tiene consecuencias negativas para el paciente, ¿quién asume la responsabilidad de dicho error?
7 robots que están revolucionando la medicina
La unión entre robótica y medicina ya ha dado lugar a la aparición de numerosos aparatos cuyo objetivo es facilitar la tarea de los profesionales médicos. En este punto vemos 7 robots para cirugía y medicina robótica que han obtenido gran éxito en los hospitales.
Robot quirúrgico Da Vinci
El robot Da Vinci es uno de los más conocidos dentro del ámbito médico y quirúrgico. La primera versión vio la luz en el año 1990 y desde entonces se ha convertido en una ayuda muy importante para cirujanos de todo el mundo.
Este robot se compone de un equipo que incluye consola de visualización, carro de desplazamiento, cuatro brazos robóticos y todos los instrumentos necesarios para realizar una operación quirúrgica (los cuáles se fijan en el extremo de los brazos robóticos).
Se trata de un sistema capaz de recibir órdenes en tiempo real y de reproducir de forma exacta los movimientos que realiza el cirujano. Es el propio profesional quien utiliza una serie de controles maestros, y visualiza toda la operación a través de una pantalla de visualización que ofrece imágenes de todo el proceso en 3D.
Tug
Tug es uno de esos robots médicos cuya función es el transporte o almacenamiento de medicación. Permite aligerar el trabajo del personal de enfermería en almacén, salas de emergencias o unidades de cuidados intensivos.
Además, Tug es capaz de realizar muchas otras funciones con un alto grado de eficacia. Por ejemplo, puede transportar muestras a laboratorios, llevar la comida a los enfermos en planta o incluso realizar tareas auxiliares de limpieza.
Todo ello permite ayudar al personal no sanitario en el ejercicio de sus funciones, y minimizar los errores que pueden cometer los humanos.
Riba
Riba es un robot japonés para ofrecer asistencia en hospitales o centros sanitarios a personas de edad avanzada.
Entre otras cosas, este robot es capaz de ayudar a las personas mayores a realizar tareas cotidianas que, por su delicado estado de salud, pueden resultar complicadas. Por ejemplo, en algo tan útil como ayudarles a levantarse de la cama y colocarse en su silla de ruedas.
Y no solo se puede utilizar con personas mayores. En realidad, el objetivo principal es ofrecer mayor independencia a cualquier paciente con problemas de movilidad. De hecho, en un principio el robot se ideó para asistencia doméstica, aunque su uso se ha limitado casi exclusivamente a hospitales.
ViRob
ViRob se un robot de exploración que está pensado para llegar a lugares del interior del cuerpo humano a donde no se llegaría con los instrumentos médicos habituales.
Se trata de un robot médico con una tamaño muy reducido, solo 14 milímetros, y que se capaz de desplazarse por el interior el cuerpo a una velocidad de 9 milímetros/segundo.
Entre sus muchas funciones está la capacidad para tratar enfermedades levando fármacos hasta zonas delicadas o de difícil acceso, o realizar incisiones y pequeñas cirugías interiores. Debido a su pequeño tamaño se puede mover por venas, arterias y otras cavidades interiores, por lo que también se emplea para destapar coágulos de sangre.
Además, no es necesaria operación de ningún tipo ya que se puede introducir con una simple inyección, o incluso ser tragado.
Jibo
Los niños son unos de los grupos de población que peor lo pasan cuando tienen que estar hospitalizados. No hay nada peor para un niño que tener que estar encerrado en una habitación de hospital sin poder jugar, divertirse o disfrutar de la vida como lo hacen los otros niños.
El robot Jibo también nació como un asistente para el hogar, pero finalmente su uso se ha limitado casi de forma exclusiva a los hospitales. Se trata de un robot cuyo objetivo es contribuir al bienestar de los más pequeños que están hospitalizados.
Jibo es capaz de realizar un gran número de funciones, todas ellas orientadas a entretener y divertir a los niños. Por ejemplo, puede cantar, bailar, contar historias y ofrecer diferentes juegos para que la permanencia en el hospital sea lo más llevadera posible.
INTELLIFILL IV
INTELLIFILL IV es un robot inteligente que se emplea para la administración de medicamentos. Su objetivo es eliminar los errores principalmente a la hora de administrar fármacos por vía intravenosa.
Este robot lee el código de barras de la orden y rellena en base a las mismas las jeringas que luego se utilizan en los pacientes, de manera que se evitan los errores humanos y las negligencias médicas.
Además, es bastante más rápido que un humano, siendo capaz de rellenar y esterilizar hasta 600 jeringuillas por hora.
Relay Robot
Se trata de otro robot cuya función es el transporte efectivo de medicamentos, suministros y muestras en el hospital. Lo más interesante es que no necesita orientarse por marcadores o sensores. Por el contrario, este robot se guía a través de un mapa electrónico y utiliza detección por láser para asegurar una desplazamiento seguro y eficaz, trazando siempre la ruta más rápida. Hasta cuenta con una alerta de mensajes por voz para informar de su presencia.
Todos estos robots han supuesto importantes avances en el campo de la medicina. Sin embargo, se trata de una tecnología muy joven y que todavía está en pleno desarrollo, por lo que cabe esperar que en el futuro se desarrollen sistemas mucho más avanzados y eficaces.
Por otro lado, uno de los mayores retos de la robótica en medicina y salud es que este tipo de sistemas se apliquen sin riesgo y de forma responsable, y que su implantación sea un complemento a los recursos humanos. Dicho de otro modo, los robots deben complementar, nunca sustituir, la labor humana en el sector médico.