La globalización, el capitalismo, el desarrollo industrial y el afán de riqueza sin importar los métodos para obtenerla han puesto en peligro la sostenibilidad del planeta. Antes la perspectiva de una posible crisis global, gobiernos, instituciones y corporaciones de todo el planeta se ven obligadas a tener en cuenta el desarrollo sostenible como uno de sus objetivos principales. Pero, ¿en qué consiste este desarrollo sustentable? ¿Cuáles son los pilares sobre los que se asienta?
Definición de sostenibilidad. ¿Qué es el desarrollo sostenible?
El desarrollo sostenible se puede definir como aquel que es capaz de conseguir un equilibrio entre crecimiento económico, desarrollo global, bienestar social y respeto al medio ambiente.
La sostenibilidad se basa en la capacidad de satisfacer las necesidades de la población actual sin poner en riesgo la viabilidad y los recursos de las generaciones futuras.
Hasta hace relativamente poco, la mayoría de empresas actuaban de acuerdo a la máxima de que “el fin justifica los medios”. Su único objetivo era obtener riqueza sin tener en cuenta los métodos o prácticas para conseguirlas.
La actividad humana ha provocado la aparición de problemas que podrían dar lugar a una crisis global: pobreza, aumento de la desigualdad, explotación laboral, contaminación, cambio climático, calentamiento global, destrucción de ecosistemas, etc.
El desarrollo sostenible consiste en la capacidad de satisfacer las necesidades de la población actual sin poner en riesgo la viabilidad y los recursos de las generaciones futuras.
El concepto de desarrollo sostenible surge así como solución a estos problemas. Unas pautas y líneas de actuación que contribuyan a continuar con el desarrollo a la vez que se fomenta la igualdad y el respeto al medio ambiente. En definitiva, la sostenibilidad pretende dejar un mundo mejor a las próximas generaciones.
Origen de la sostenibilidad. Un poco de historia
La primera vez que se manifestó la necesidad de poner en marcha prácticas en favor de un desarrollo más equitativo y controlado fue en la Conferencia sobre el Medio Humano de Estocolmo, en el año 1972.
La idea o concepto de desarrollo sostenible fue planteada por primera vez de forma similar a como hoy la conocemos por la Unión Internacional sobre la Conservación de la Naturaleza (UICN) en 1980.
A lo largo de los años 80 se hizo cada vez más patente la necesidad de establecer una líneas de actuación que promovieran la igualdad y el respeto el medio ambiente. Así, en 1983 la ONU creó la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, dirigida por la política noruega Gro Harlem Brundtland.
Precisamente Brundtland fue quien acuñó por primera vez el término de “desarrollo sostenible”, en su famoso Informe Brundtland publicado en 1987. En dicho informe se alertaba sobre las consecuencias negativas que estaban teniendo la globalización y el desarrollo económica, y se proponían una serie de pautas para hacer frente a dichos problemas.
Otro paso para promover la sostenibilidad a nivel gubernamental e institucional se dio en el año 1992, en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo celebrada en Río de Janeiro. En esta Conferencia se aprobó la Agenda 21 o Programa 21, un plan de acción global que promovía su adaptación a nivel local para abordar los problemas concretos de cada comunidad.
Fruto de la creación de esta Agenda, diversas regiones de Europa crearon en 1994 la Carta de las Ciudades Europeas hacia la Sostenibilidad o Carta de Aalborg, con el objetivo de desarrollar sus propias agendas 21 locales.
Desde finales del siglo XX y en el siglo XXI los Gobiernos, corporaciones e instituciones han seguido desarrollando normativas en favor de la sostenibilidad. Actualmente se encuentra vigente la Agenda 2030, una hoja de ruta diseñada por la Organización de las Naciones Unidas que contiene los objetivos para lograr un desarrollo sostenible.
Objetivos del desarrollo sostenible
La Agenda 2030 de la ONU hace referencia a los principales objetivos del desarrollo sostenible y las metas a alcanzar para proteger el medio ambiente, fomentar el equilibrio y mejorar el bienestar social.
En la siguiente infografía puedes ver los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU:
Ventajas del desarrollo sostenible
Puede parecer tremendista, pero la principal ventaja del desarrollo sostenible es su capacidad de proporcionar soluciones de viabilidad que armonicen aspectos sociales, económicos y ambientales, con el objetivo de salvar al planeta de una posible crisis global.
Está demostrado que considerar los temas económicos, sociales o ambientales por separado no es la manera correcta de hacerlo. Al contrario, el desarrollo sostenible se ha de caracterizar por buscar el avance económico sin dejar de lado la igualdad, el bienestar social y el cuidado al medio ambiente.
Apostar por la sostenibilidad supone abogar por la creación de un mundo más equitativo, solidario, ético y, en definitiva, un mundo mejor para todos.
En cuanto a las ventajas concretas del desarrollo sostenible podemos citar las siguientes:
- Fomentar el crecimiento de los países subdesarrollados o en vías de desarrollo, en los que se concentra un gran porcentaje de la pobreza mundial.
- Atender necesidades humanas y sociales básicas, como el acceso al empleo, a la energía, la educación, o al agua potable, entre muchas otras.
- Utilizar de forma responsable los recursos del planeta, conservando de forma más óptima los recursos no renovables y distribuyendo de manera más igualitaria aquellos que son renovables.
- Adecuar el desarrollo de la tecnología para orientarla a las exigencias del desarrollo sostenible.
- Contribuir el ahorro de agua y el ahorro energético.
- Reducir la contaminación y frenar problemas medioambientales graves como son el calentamiento global y el cambio climático.
- Prevenir la destrucción de ecosistemas y proteger la biodiversidad del planeta.
- Mejorar la conectividad urbana para mejorar el bienestar social y evitar la contaminación provocada por la emisión de CO2 y otros gases contaminantes.
- Mejorar la salud de las personas y reducir su exposición a sustancias nocivas.
Pilares de la sostenibilidad
La sostenibilidad de asienta sobre tres pilares fundamentales:
- Respeto al medio ambiente: el desarrollo debe ser compatible con el respeto a la biodiversidad y la preservación de los ecosistemas. Para ello es necesario optimizar al uso de los recursos energéticos, disminuir la emisión de residuos gases contaminantes y reducir los tiempos de ejecución de las actividades industriales.
- Bienestar social: otro de los pilares de la sostenibilidad es conseguir una sociedad más justa, en la que exista mayor igualdad, se erradique la pobreza y, en definitiva, se aumente la calidad de vida de todas las personas.
- Desarrollo económico: por supuesto, el desarrollo sostenible no olvida la necesidad de generar riqueza. Sin embargo, esta riqueza económica debe ser compatible con otras cuestiones como el respeto a lo valores humanos y el medio ambiente.
¿Cómo alcanzar el desarrollo sostenible?
Los conceptos de sostenibilidad y desarrollo sostenible se ha de desarrollar a diferentes niveles, desde un enfoque global hasta las medidas más locales.
En primer lugar los Gobiernos han de desarrollar normativas que marquen las pautas a seguir para fomentar el desarrollo sostenible. Asimismo, es necesaria la cooperación entre gobiernos, establecer alianzas y proponer medidas que trasciendan las fronteras.
Por otro lado, es necesaria la cooperación de corporaciones, compañías, empresas, organizaciones e instituciones. No solo han de cumplir con las normativas gubernamentales, sino que han de ser capaces de desarrollar sus propios modelos y asentar al desarrollo sostenible como uno de sus pilares básicos. En este sentido, es necesaria la concienciación de todos los miembros de las organizaciones, desde los altos directivos hasta los miembros de menor rango.
Otra de las claves del desarrollo sostenible es la cooperación ciudadana. Mucha gente tiende a pensar que los pequeños actos no sirven de nada. Sin embargo, muchos pocos hacen un mucho. Es necesario que la importancia de abogar por un desarrollo sostenible se instala en lo más profundo de la sociedad y que, poco a poco, todos contribuyamos a un uso responsable de los recursos. Pequeños gestos como el reciclaje, el ahorro de energía en casa o el uso de transportes no contaminantes también contribuyen a fomentar la sostenibilidad.
Evidentemente, la capacidad de poner en marcha medidas a todos estos niveles requiere un profundo cambio de mentalidad que resulta complicado de conseguir y que requiere su tiempo. Lo importante es ir adoptando estas actitudes de forma paulatina para que poco a poco se conviertan en costumbres.
El desarrollo sostenible a distintos niveles
Al escuchar los términos desarrollo sostenible y sostenibilidad mucha gente lo asocia con algo ligado exclusivamente al respeto al medio ambiente. Sin embargo, la sostenibilidad se puede aplicar en muchos sectores y a distintos niveles.
Medioambiental
La sostenibilidad medioambiental se basa en la manera en que se deben estudiar y proteger los ecosistemas y la biodiversidad. Entre otros factores, se ha de tener en cuenta la utilización de recursos, el gasto energético, la contaminación y calidad del aire, uso de energías renovables, ahorro de agua, etc.
Actualmente cobra especial relevancia la relación entre desarrollo sostenible y cambio climático. El aumento de temperatura del planeta provocado por la emisión de gases de efecto invernadero y la destrucción de la capa de ozono es una de las principales causas de problemas medioambientales como el deshielo en los Polos o las sequías.
Social
La sostenibilidad social se centra en el desarrollo de grupos sociales concretos, principalmente de las comunidades más desfavorecidas. Las medidas de desarrollo sostenible a nivel social buscan fomentar el crecimiento de personas, comunidades y culturas, mejorando su calidad de vida a través del acceso a la sanidad, la educación o el fomento de la igualdad de género.
Se trata de crear un contexto óptimo social en el que el crecimiento económico y el desarrollo social beneficie a toda la comunidad, apostando por un reparto lo más equitativo posible de la riqueza y los recursos.
Empresarial
La sostenibilidad empresarial hace referencia a la capacidad de las empresas de generar riqueza y desarrollar sus actividades durante un tiempo prolongado, pero teniendo siempre en el punto de mira su responsabilidad social y su obligación de tener en cuenta criterios sociales, éticos y ambientales.
Energético
Si hablamos de sostenibilidad energética, nos tenemos que referir a tres dimensiones:
- Seguridad energética: se basa en la gestión eficaz de la energía por parte de importadores y exportadores, la capacidad de las empresas para hacer frente a las necesidades energéticas, y la creación de infraestructuras eficientes.
- Equidad social: consiste en proporcionar a la población acceso a la energía de forma igualitaria y a un coste razonable El incumplimiento de estos principios deriva en pobreza energética.
- Reducción del impacto ambiental: es la necesidad de obtener energía a partir de fuentes renovables o con bajas emisiones contaminantes, con el objetivo de recudir la contaminación del aire o el efecto invernadero.
Alimentario y gastronómico
¿Sabías que con la comida que se desecha en el mundo se podrían alimentar a 2.000 millones de personas? La sostenibilidad alimentaria aboga por el uso sostenible de los alimentos y su reparto equitativo, con el objetivo de garantizar una nutrición adecuada para todos. El desperdicio de alimentos no puede ser una opción cuando hay comunidades muy necesitadas.
Arquitectónico y urbanístico
La arquitectura sostenible consiste en el uso de técnicas y materiales sostenibles durante el proceso de diseño y construcción de edificios. Del mismo modo, los edificios sostenibles han de ser capaces de proporcionar servicios de abastecimiento eficientes y minimizar su impacto negativo en el medio ambiente.
Por ejemplo, hay edificios que incluyen placas fotovoltaicas que permiten aprovecharse de la energía solar, o de zonas verdes en la azotea que contribuyen a mejorar y oxigenar la atmósfera.
Turístico
El turismo sostenible tiene como objetivo la implantación de medidas y el uso de recursos que permitan su viabilidad a largo plazo sin poner en riesgo los ecosistemas, patrimonio o capital cultural, natural y social de las comunidades. Un ejemplo sería el cuidado y respeto de reservas naturales o áreas especialmente protegidas.
Textil
La industria textil es una de las que más riqueza genera en el mundo y, por tanto, es un importante factor para la sostenibilidad. El concepto de moda sostenible se asienta sobre una serie de pilares:
- Usar materiales reciclados o reciclables para la fabricación de prendas.
- Conservar y utilizar de forma eficiente los recursos necesario para la fabricación textil.
- Reducir del uso de insumos auxiliares.
- Poner en marcha medidas para minimizar la contaminación de las fábricas.
- Garantizar los derechos laborales de los trabajadores y evitar la explotación laboral.
Agrícola y ganadero
Los sectores agrícolas y ganaderos son fundamentales ya que generan productos de primera necesidad. Estos sectores han sufrido un importante atraso en su desarrollo que ha impedido maximizar la producción y agregar valor a los productos. La modernización de la agricultura y la ganadería y el uso de nuevas tecnologías da lugar a un nuevo escenario en el que es posible aumentar la rentabilidad del capital invertido. Así, muchas empresas de estos sectores ya emplean tecnologías que les permiten mejorar los sistemas de riego, aumentar la calidad del suelo, agilizar la recogida de productos o llevar un control exhaustivo de la producción.
Logística
Las tareas de almacenaje, transporte o distribución son susceptibles de provocar problemas al medio ambiente Por ejemplo, la distribución de mercancías requiere del uso de medios de transporte que utilizan combustibles contaminantes. La logística verde o green logistics consiste en el desarrollo de procesos o infraestructuras que permiten crear sistemas de logística capaces de realizar un uso más eficaz de los recursos.
Química
Por su parte, la química sostenible o química verde se preocupa del desarrollo de productos químicos que reduzcan la exposición de las personas o el medio ambiente a productos tóxicos o nocivos para la salud.
Problemas del desarrollo sostenible
El desarrollo sostenible se enfrenta a diversos problemas. Uno de ellos es que requiere un cambio de mentalidad que algunos grupos no están dispuestos a asumir, en especial los grandes capitales, ya que consideran que amenaza su actual posición predominante.
El desarrollo continuo desde la revolución industrial ha nos ha llevado hacia un mundo globalizado en el que los grandes países practican un capitalismo exacerbado en el que el dinero lo es todo. Reordenar estas prioridades resulta muy complejo, ya que requiere cambiar algunos de los pilares básicos sobre los que se han sentado la sociedad y la economía durante décadas.
Este capitalismo ha llevado a un aumento constante de la pobreza en las zonas más desfavorecidas y a un incremento de la brecha entre ricos y pobres. Mucha gente ha crecido con valores sociales marcados por el egoísmo y el propio enriquecimiento sin importar la situación de los demás. Resulta difícil que los más poderosos renuncien a su posición y reconozcan su responsabilidad y capacidad para contribuir al desarrollo sostenible.
Uno de los problemas del desarrollo sostenible es que requiere un cambio de mentalidad que algunos grupos no están dispuestos a asumir, en especial los grandes capitales, ya que consideran que amenaza su actual posición predominante.
Pero ojo, porque no es cuestión de echarle toda la culpa a los poderosos. Los ciudadanos de a pie como tú y como yo también tienen su responsabilidad. Muchas personas no contribuyen a fomentar el desarrollo sostenible porque tienen la creencia de que sus acciones individuales no sirven para nada.
En determinados contextos también resulta difícil preocuparse por la situación ajena, cuando han de enfrentare a sus propios problemas. Por ejemplo, dentro de un mismo país o región pueden existir grandes desigualdades y brechas en materia económica, de salud, educación o acceso a servicios básicos.
En algunos casos, algunos de estos problemas se encuentran muy enraizados en la sociedad. Por ejemplo, la falta de trabajo, las malas condiciones o la incertidumbre laboral. En muchos casos, son los más poderosos quienes fomentan este tipo de situaciones, véase las grandes empresas que expolian sin remordimientos el territorio de países subdesarrollados, quitándoles su riqueza y contratando mano de obra a precio de saldo.
Muchos de estos problemas se ven favorecidos por la ausencia de políticas de protección social o en estado muy precario. Por ello, resulta fundamental la cooperación de los gobiernos para establecer medidas globales que protejan a todos los territorios o grupos sociales por igual.
Por último, hay determinadas zonas del planeta en las que las circunstancias hacen difícil el desarrollo sostenible. Por ejemplo, los territorios que se ven afectados por desastres naturales como huracanes, terremotos o tsunamis, acontecimientos que pueden dar al traste en muy poco tiempo a años de esfuerzo.
Ejemplos de proyectos en favor del desarrollo sostenible
A continuación vemos algunos ejemplos de iniciativas que buscan fomentar el desarrollo sostenible.
SDSN Youth
Es un proyecto lanzado en el año 2015 que busca informar a los más jóvenes sobre el trabajo que realiza la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible. Tiene su sede en la Universidad Autónoma de Madrid, desde donde se realizan diversas iniciativas que fomentan la participación de los alumnos en programas locales y globales.
Lean&Green
Se trata de una iniciativa desarrollada por AECOC y que tiene como objetivo el desarrollo de la logística sostenible. El proyecto nació a nivel europeo en el año 2008 en países como Holanda, Bélgica, Alemania, Italia, Suiza, Eslovaquia y la República Checa. En España ya cuenta con 15 empresas del sector adscritas, cuya meta es mejorar la eficiencia de las cadenas de suministro y reducir las emisiones contaminantes de los sistemas logísticos. En concreto, las empresas que participan en esta iniciativa se han comprometido a reducir en un 20% sus emisiones de gases de efecto invernadero en los próximos 5 años.
Pledge 2025
Se trata de una iniciativa que busca luchar contra el cambio climático. En el caso de España destacan proyectos como el de BBVA, que piensa invertir 100.000 millones de euros hasta el año 2025 en favor del desarrollo sostenible. Con este proyecto Compromiso 2025 BBVA pretende aportar su grano de arena al objetivo de frenar el calentamiento global, aumentar la eficiencia energética y promover la responsabilidad en el uso de combustibles fósiles.
Kuapa Kokoo
Entre las muchas iniciativas internacionales para el desarrollo sostenible se puede destacar el de la cooperativa Kuapa Kokoo, en Ghana, Este cooperativa está situada en Kumasi, uno de los principales centros de producción de cacao del mundo. El cacao producido en esta cooperativa cuenta con la certificación Fairtrade, una prima que es reinvertida para el desarrollo de proyectos para la comunidad, por ejemplo para proporcionar acceso a agua potable, a la electricidad o a la atención sanitaria
Resumen
En definitiva, el desarrollo sostenible se ha convertido en una necesidad, una exigencia para hacer de este planeta un mundo más justo y feliz. Antes de terminar queremos recordarte una de las frases más representativas del famoso Informe Brundtland, y que resume a la perfección la importancia de apostar por la sostenibilidad:
El desarrollo sostenible se basa en abastecer las necesidades de la generación de hoy sin comprometer el abastecimiento de las generaciones del mañana.